Este año tocaba
cerrarlo corriendo una San Silvestre.
La ciudad elegida fue
Sigüenza donde decidimos pasar la Nochevieja.
La carrera se disputó
la mañana del 31 de diciembre, con un ambiente fresco y festivo.
El recorrido, de 5 km,s
transcurría por parte del centro de la
ciudad, pasando a los pies de la hermosa Catedral románica de Sta María La Mayor,
iniciada en el Siglo XII.
Ritmo fuerte con un
corredor que desde el primer momento se destaca en cabeza, incrementando poco a
poco la diferencia con los corredores que le persiguen. En los dos primeros
kilómetros que transcurren desde el Parque de la Alameda, pasando por un tramo
de carretera hasta que se gira a la izquierda para adentrarnos al casco
histórico me sitúo entre el 5º y el 3º puesto, consolidando esta posición en la
subida tendida que conduce a la Catedral.
Al término del punto
más alto del recorrido unos 200 metros sobre pasada ésta, consigo emparejarme
con el corredor que marcha segundo, pero ya en terreno más favorable cambia el ritmo
y me descuelgo. Así que afronto el último kilómetro en 3ª posición, con renta
suficiente. Tiempo final de 18´00´´ para 5,1 km,s según GPS.
Buen chocolate, bonito
trofeo, con una miniatura de la Puerta del Mercado y Torre del Gallo, conjunto
que forma parte de la Catedral.
Y después a comer “por
la gorra”, y es que la organización
obsequiaba a los 4 primeros clasificados con vales para comer en la villa, a
nosotros nos tocó en la Cafetería Los Soportales dónde casualmente había
desayunado un riquísimo trozo de tarta de manzana.
Las migas que me apreté
“brutales” y el filete de buey también delicioso.
Los propietarios gente muy maja también, sitio muy recomendable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario